En el noroeste de China, específicamente en la región de Xinjiang, se encuentra un lugar poco conocido pero fascinante: el desierto de Gurbantünggüt. Este lugar, también conocido como «el desierto de la muerte blanca», es uno de los desiertos más fríos del mundo y una de las zonas más inhóspitas del planeta.
Características del desierto
El desierto de Gurbantünggüt cubre una extensión de aproximadamente 48.000 kilómetros cuadrados, lo que lo convierte en el segundo desierto más grande de China. Se encuentra a una altitud de 500 a 1.500 metros sobre el nivel del mar y su clima es extremadamente frío y seco, con temperaturas que pueden alcanzar los -40°C en invierno y los 40°C en verano.
Además de su clima extremo, una de las características más llamativas de este desierto es su paisaje. A diferencia de otros desiertos, en Gurbantünggüt no encontramos grandes dunas de arena, sino que predominan las llanuras de gravilla y las formaciones rocosas. También hay algunos oasis en la zona, donde se pueden encontrar pequeñas comunidades de pobladores que se dedican principalmente a la agricultura y a la cría de animales.
La flora y fauna del desierto
Debido a las duras condiciones climáticas, la flora y fauna del desierto de Gurbantünggüt son muy limitadas. En cuanto a la vegetación, predominan los arbustos y hierbas resistentes a la sequía, así como algunas especies de cactus. En cuanto a la fauna, se pueden encontrar algunas especies de mamíferos como el camello bactriano, el lobo de Gobi y el zorro del desierto. También hay una gran variedad de aves migratorias que pasan por la zona durante sus viajes anuales.
El misterio del desierto de la muerte blanca
A pesar de su nombre y su reputación como uno de los lugares más inhóspitos del mundo, el desierto de Gurbantünggüt sigue siendo un lugar misterioso y poco explorado. Se cree que en la antigüedad, esta zona era un lago y que con el paso del tiempo se fue secando, dejando atrás un paisaje desértico. Sin embargo, todavía no se sabe con certeza cómo se formó este desierto y qué fuerzas geológicas están detrás de su creación.
Otro misterio que rodea a este lugar es la presencia de extrañas formaciones rocosas, que parecen esculpidas por manos humanas. Algunos creen que estas formaciones son obra de antiguas civilizaciones que habitaban la zona, mientras que otros piensan que son simplemente formaciones naturales. Sea cual sea la explicación, estas rocas son una de las atracciones más populares del desierto de Gurbantünggüt.
Conclusión
En resumen, el desierto de Gurbantünggüt es un lugar fascinante y misterioso que merece ser explorado. A pesar de sus duras condiciones, es un lugar lleno de belleza y que alberga una flora y fauna únicas. Si te animas a visitarlo, asegúrate de llevar ropa y equipo adecuados para protegerte del frío extremo y prepárate para adentrarte en un lugar que te dejará sin palabras.